Miedos, amores, amigos, rencores, heridas, caricias, espejos, charlas, misterios, matices, mates, cigarrillos, fresias, chocolates, cuerdas flojas, histeria, mil lágrimas, sonrisas, esperas, teléfonos, arrepentimientos, gritos, fiesta, daiquiris, suspiros, sorpresas, mails, espacio, incertidumbre, límites, angustia, placer, egoísmo, soberbia, impotencia, Benedetti, salidas, experiencias, éxitos, fracasos, Cortázar, Galeano, música, melodías, cerveza, café, castigos, libertad, soledad, reconocimientos, lunas y soles, los domingos de siempre, mentiras, sueños, finales, pesadillas, cambios, Arlt, despertadores, consejos, traiciones, carcajadas, desilusiones, esperanzas, caminos, opuestos, miradas, Cien años de soledad, costumbre, tormentas, abrazos, dolores, nacimientos, rupturas, abismos, puertas, candados, almuerzos, proyectos, viajes, silencios, mensajes, olvidos, carencias, paciencia, calma, sombras, peleas, manos, esfuerzo, todo y nada. Más y menos. Menos de lo mismo.

domingo, 19 de junio de 2011

Agujas

Sucede que el tiempo es una enorme, inmensa paradoja en la que un día puede ser eterno y tediosamente vacío y el siguiente, una incansable vorágine de figuras que se multiplican al aparente infinito.
    Sucede que el ánimo a veces envuelve todo lo demás y uno es sólo una abstracción incapaz de materializarse en nada.

lunes, 6 de junio de 2011

Roberto Arlt: un gigante rabioso

(Publicada en el número de mayo de revista El cruce).-  Recordado como uno de los escritores argentinos más transgresores del siglo XX, el autor de novelas como “Los siete locos” y “Los lanzallamas”, supo ser también un periodista crítico de su época en sus inolvidables aguafuertes, un sagaz dramaturgo y un frustrado inventor, oficio que, sin embargo, bien supo aprovechar en su prolífera obra literaria.